Archivo del sitio

Cristina Presidenta, pero YA!

Hay algo mas evidente que la desorientación mezclada con incertidumbre que afectan a todo el conjunto de la coalición que se conformó en el Frente de Todos???. Ya transcurrieron 3 años de la experiencia y si hay una certeza es que el Gobierno de Alberto Fernández no ha sido ni por asomo lo que se esperaba. Cuánto se le ha permitido NO SER por el sólo hecho de que era nuestro gobierno al que votamos porque lo diseñó La Jefa? Cuántas críticas hemos disimulado porque TUGO? Cuánto nos hemos callado?

El hombre estuvo todo este tiempo más preocupado por el que dirán y no lucir como marioneta que en cumplir con sus promesas, hacer un buen gobierno y honrar los compromisos asumidos con quienes lo votamos, de nuevo, sólo porque nos lo indicó Cristina. Quién no hubiera ganado ni una elección en una pequeña sociedad de fomento se encontró con banda presidencial y bastón, porque en su magnanimidad extrema, Cristina lo eligió.

Sucede que el tipo ni bien llegó, se la creyó. No consultó la conformación del gabinete. Empezó a definir unilateralmente políticas que debió haber consultado porque no fue electo por ser El quien aglutinaba voluntades sino como el representante de una coalición. Su fortaleza debió ser siempre la de representar a todo el Frente de Todos y no la de ser el presidente Alberto.
Así fue como con el tiempo, empezó a cerrarse sobre si mismo y 4 adláteres y dejó de ser presidente de un Frente, del que desdeñó siempre, para aislarse en un sillón vacío de poder porque nunca accionó como tal, nunca impuso una sola política, nunca se enfrentó a los adversarios y mucho menos a los enemigos y, para colmo y fundamentalmente, porque se alejó políticamente de quien era su principal sostén y electora. Ahí mismo ya empezó a fracasar. No puede ser Presidente de la Argentina quien pretende caminar en ojotas.

Ahora, en este año electoral, en su caprichosa candidatura, su única tarea es obstructora, no aporta nada, no hace nada. No nos enteramos de las políticas de gobierno. Su gobierno es Massa y su hiperactividad pero que contagiada de la falta de coraje presidencial, no atina a controlar la inflación y sus multiples causas. No puede ser que se tolere mansamente que los formadores de precios de la cadena alimentaria, sigan aumentando indiscriminadamente todo como si no hubiera un pueblo al que tenemos el deber de defender y que padece esos aumentos y se llena de necesidades. Hoy por hoy es el presidente tapón, porque estamos maniatados a su inacción y, cuando no, a sus errores y decisiones equivocadas.

Ninguna elección, de 1983 a esta parte, tiene / tendrá la importancia de la de este año 2023. Está claro lo que la oposición tiene para ofrecer: su jefe lo dijo claramente, vienen a dinamitar todo. El tándem Bulrich, Milei, Macri, Larreta es lo peor que le podría pasar al futuro de la Argentina. Ya fue terrible el fracaso de hace cinco minutos de la gestión macrista que nos condicionó con esa deuda monstruosa e impagable que nos obliga a rendir examen cada tres meses y debemos hacer los deberes para que el cuchillo que tenemos en el cuello no corte ni se entierre en una Argentina que está al borde de su capacidad de tolerancia.

Por lo tanto, este estado de incertidumbre y desorientación electoral más la alta inflación y la delicada situación social pero fundamentalmente, el no estar cumpliendo con nuestra esencia fundacional en términos de representación política nos impone accionar hacia adelante de manera positiva y definir un curso de acción que nos conmueva, que nos movilice y nos devuelva la iniciativa de manera de reflejar cabalmente, que no estamos dispuestos a defeccionar en nuestra defensa de los intereses populares y entonces, accionar en consecuencia.

Debemos iniciar un operativo clamor pero para que RENUNCIE ALBERTO, que Cristina asuma YA MISMO la presidencia, que recupere la autoridad presidencial y ponga en marcha un plan de congelamiento de precios por 10 meses de manera de frenar abruptamente los aumentos. Hay que utilizar todas las herramientas que tiene el estado a su alcance, reponer en su totalidad la ley de medios y controlar los discursos de odio. Dicho plan debe estar acompañado de una renegociación completa del acuerdo con el fondo pero asimismo de una directiva concreta de investigación de QUE SE HIZO CON SEMEJANTE DINERAL, indicando quienes son los responsables de la deuda y la consiguiente fuga de divisas, ya que no quedó un sólo dólar en la Argentina. Se debe exigir la renuncia de los mienbros de la Corte y en las principales cámaras federales y casación, de quienes participaron de los planes de persecución y encarcelamiento de dirigentes empresarios y opositores. La renuncia de todos los huemules implicados en la excursión a Lago Escondido y la re-negociación de las licencias de internet, radio y televisión con todas las licenciatarias que no bajen los precios y se comprometan a dejarlos fijos por los mismos 10 meses del acuerdo de precios, que debe incluir a todos los precios y tarifas de la economía. Asimismo, se debe otorgar un aumento de suma fija de $50.000 a todos los trabajadores, anular los dólares diferenciales (devaluación encubierta) tipo dólar soja o equivalentes y se debe exigir la liquidación de divisas del sector agropecuario en un plazo máximo de 30 días, plazo que se aprovechará para crear la nueva entidad estatal que regulará todo el comercio exterior.

La Junta Nacional de Granos de Argentina fue derogada en 1991, durante el gobierno de Carlos Menem, a través de la Ley Nº 23.928, que la disolvió y transfirió sus funciones al Ministerio de Economía y Obras y Servicios Públicos. Por otro lado, la Junta Nacional de Carnes de Argentina fue derogada en 1980, durante la presidencia de Jorge Rafael Videla, a través del decreto-ley N° 22.151. La derogación de la Junta Nacional de Carnes se produjo en el marco de las políticas neoliberales que se implementaron en ese momento en Argentina, las mismas que en el menemato. Por lo tanto, nacionalizar el comercio exterior de granos y de carnes no es algo nuevo. Si resulta nuevo y disruptivo en cambio, dinamitar todo o quemar el Banco Central. Derogar retenciones y devaluar no es nada nuevo y forman parte de las iniciales políticas que marcaron a fuego el fracaso macrista que aconteció hace muy poco tiempo en la argentina y cuyas consecuencias aún seguimos pagando. No puede ser que el Estado deba depender de las decisiones de 7 u 8 empresas transnacionales para hacerse de las divisas del producido en tierras argentinas.

Lo mismo debe ocurrir con los recursos naturales, el control de las vias navegables y los recursos energéticos que deben ser controlados y manejados por empresas nacionales de manera de poder modificar la matriz productiva de la argentina para que dejemos de ser el granero del mundo del siglo pasado, y recuperemos el crecimiento con la movilidad ascendente característica de los procesos inclusivos que encabezó el kirchnerismo. Es necesario recuperar la identidad, recuperar la mística, renovar la esperanza, y movilizar al conjunto de la sociedad alejándola de los verdugos que se menean por la media hegemónica, ensalzados por los odiadores y odiadoras que nadan en moco y bilis, y todo eso es necesario hacerlo ya, con CRISTINA PRESIDENTA YA!

Mañana sería tarde.